domingo, 24 de mayo de 2009

Muchas veces no sé elegir, o me gustan las cosas difíciles, porque a decir verdad ¿A quién le gusta las cosas fáciles? Tengo que aprender que si espero a mí momento, tarde o temprano voy a conseguir lo que quiero. Lo fácil, como lo tengo en la mano, se me va sin darme cuenta. Lo difícil cuesta, pero con sacrificio ¿quién no puede obtener lo que quiere? Nunca digas nunca.

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